18 de octubre de 2018

Por Ávila con Adaegina. 1. En El Barco de Ávila

A falta de imagen de todo el grupo, ésta de algunos amigos de Adaegina después de un rato de charla con los paisanos de El Barco delante del puente medieval. El pretil del puente, iluminado por las luces del atardecer.
Comenzando por el principio. Salimos de Cáceres el viernes por la tarde camino de Ávila. A medio camino, parada en El Barco de Ávila (antiguamente, El Barco de Tormes). Casi sin bajar del autobús Javier Gómez consiguió una "foto callejera" (Street Photography), de las que definen lo que pasa en un pueblo. "Robado" con el móvil, procesado en b/n et voilá:

Nuestra primera imagen del Barco de Ávila, captada por Javier Gómez con su móvil. Barcenses en tertulia. (Con tu permiso, Javier)
A la par que Javier, tampoco pudimos resistir la tentación de captar esa imagen sugerente del "mentidero" al atardecer en el parque. Sólo faltó echar un rato con estos paisanos de El Barco, que seguro podrían habernos contado muchas cosas. Es una forma de ver un pueblo posiblemente más interesante que los canales al uso. Aquí dejamos nuestra instantánea. También un "robado".

Otra "fotomóvil" de la charla de los barceños.
Un buen comienzo. Después visita al Castillo de Valdecorneja, imponente fortaleza que perteneció a los señores de Valdecorneja y a los condes y duques de Alba. Su emplazamiento es sobre un cerro, desde el que controla un amplio territorio además del paso por el puente medieval sobre el Tormes. De planta cuadrada tiene torre de homenaje y cuatro cubos en las esquinas.

Javier captando la mole imponente del castillo y vistas de algunos elementos del mismo
 
También entramos en la Cárcel Antigua, hoy habilitada para Biblioteca municipal y Salas de Exposiciones, fue construida a mediados del XVII, cobre dos casas de la Calle Mayor compradas a la parroquia.


Al ser una hora próxima a la misa, pudimos visitar la iglesia de la Asunción, en la que nos llamó la atención su órgano y retablo barrocos y las cuatro rejerías. La reja de separación del presbiterio, con un rico repertorio ornamental de carácter plateresco y escudos de los Alba, en aquel momento, aparecía iluminada en una zona por los rayos del sol poniente.

Órgano barroco construido por José de la Rea entre 1771 y 1773. La caja, con fondo azul y rojo, se adorna con guirnaldas y medallones de rocalla dorados. Los tubos y trompetería se organizan en siete calles.
Escena de la Coronación de la Virgen, una de las que componen el retablo barroco del presbiterio. Construido en el XVII, se adapta a la forma poligonal del ábside.
Las tres rejerías que cierran el espacio del presbiterio y las capillas de los lados de la epístola y del evangelio. Elementos platerescos, escudos, emblemas, ... componen un bello conjunto de rejas-tabique. La rejería central aparece iluminada por los últimos rayos de sol.
Bajamos al puente medieval. Ocho arcos desiguales, unos en punto redondo, otros en ojiva, se apoyan sobre robustas pilas de sillares con grandes tajamares de sección triangular. Es un puente alomado. Junto a él, en el paseo, charlamos un rato con algunos barcenses o barceños (ver la foto de portada). Entre otras cosas, sobre su "pique" con los pitácios de Piedrahita. Pero no fuimos capaces de sacarles con qué apodo se les nombra a ellos. ¿Portugueses?.

Recias pilas con tajamares, arcos de medio punto, arcos ojivales, fábrica de sillares, perfil alomado... los elementos que definen el puente medieval sobre el Tormes. Ahora dorado por los últimas luces de la tarde.
De vuelta, pasamos por la Plaza Mayor, un espacio rectángular con soportales que lo definen como una típica muestra de la arquitectura popular.

En la Plaza Mayor. Foto: Javier Gómez
La corta estancia nos impidió recorrer también otros interesantes elementos de este pueblo declarado Conjunto Histórico-Artístico. Nos quedó pendiente para otra ocasión las murallas y la Puerta del Ahorcado, la calle La Gallareta, las ermitas del Cristo del Caño y de San Pedro, o la casa de los Balcones, la de la Recaudación y la de los Gasca. Sí pasamos por el cine.

Cine-Teatro Lagasca, restaurado en 2005 tras tres decadas cerrado.
Y después, camino de Ávila. Hacia los Cuatro Postes.
Muchas gracias a Francisco Javier Gómez por las dos fotografías que nos ha cedido para esta entrada.

Realización: José Vidal Lucía.

2 comentarios:

Santiago dijo...

Extraordinario reportaje. Al leerlo vuelven al recuerdo las vistas y vivencias de esos momentos y la buena convivencia entre los que íbamos en la excursión. Gracias, José Vidal.

Unknown dijo...

Charo Rodero
Parada breve, pero el buen tiempo nos permitió callejear y disfrutar de algunos de sus monumentos y de sus gentes. Gracias por las fotos, Javier y Vidal, sois unos artistas.
Enhorabuena por el reportaje