30 de marzo de 2017

Así lo siento yo. Gargantilla con galápago de Ceclavín.

Vicente Pozas inicia su intervención en la Sala 11 de Museo de Cáceres
El pasado sábado, 25 de marzo, asistimos a la tercera charla del ciclo “Así lo siento yo. Una visión personal de nuestro Patrimonio cultural”, que tuvo lugar en el Museo de Cáceres desde las 12,00 del mediodía, y que en esta ocasión corrió a cargo de Vicente Pozas Mirón, conocido periodista cacereño que es seguido por muchos oyentes en Onda Cero Radio.

Vicente había escogido para su intervención una gargantilla con su cruz galápago de filigrana procedente de Ceclavín, y nos recibió en la Sala 11 del Museo frente a la vitrina que alberga la pieza escogida. A la vista de ese conjunto de filigrana y del resto de joyas que pueden verse en la vitrina, Vicente nos dio una serie de pinceladas sobre los motivos que le habían llevado a elegirlas, siendo el principal de ellos el estrecho vínculo que su familia paterna, procedente de Ceclavín, tiene con ese arte tan nuestro de la joyería de filigrana, algo que el propio Vicente desconocía hasta hace pocos años.

Ante la vitrina sobre Orfebrería. Foto: Goyo Herrera.
Vitrina con piezas de orfebrería, Foto: Goyo Herrera

Foto: JVidal Lucía
Ya en el Salón de Actos, nuestro invitado comenzó por desgranar algunas informaciones sobre las joyas de filigrana en la provincia cacereña, destacando la vitalidad que tuvo a principios del siglo XX y las profundas raíces que algunas investigaciones le atribuyen, remontándose incluso hasta las piezas del Tesoro de Aliseda, entre las que efectivamente hay algunas que incorporan esta técnica artística.

A lo largo de la charla, Vicente explicó los fundamentos de la técnica de la filigrana, consistente en la confección de todo tipo de joyas de oro, y también de plata y cobre dorados o en su color, a partir de un fino hilo de metal, con el que el orive, palabra que designa al artífice de estas joyas, va rellenando la estructura de las joyas.

Foto: JVidal Lucía
Foto: JVidal Lucía

Boda de Agustín Vicente Pozas
Después de citar varias publicaciones que se refieren a la filigrana cacereña, y de incidir en el origen portugués de gran parte de las joyas fabricadas por los orives, nos detalló el motivo de su elección de estas piezas. En efecto, en la familia paterna de Vicente Pozas ha habido varios de los más importantes orives de Ceclavín y de Cáceres; el abuelo de Vicente, llamado también Agustín Vicente Pozas, fue un orive con mucha fama en la ciudad de Cáceres, que fabricó durante años las joyas típicas del aderezo regional que vendía su hermano Bernardo, en la que en aquellos días fue la más importante joyería de la ciudad.

Agustín Vicente Pozas, a su vez, se había casado con la hija de su maestro, Argimiro Barco Pozas, bisabuelo de nuestro conferenciante del sábado, que probablemente puede considerarse como el más importante orive de Ceclavín en el primer tercio del siglo XX. Las joyas de Argimiro figuraron en el pabellón de Extremadura de la Exposición Iberoamericana de Sevilla en el año 1929.

Pieza de orfebrería de Argimiro Barco y su dibujo en el libro de modelos.

Curiosamente, todo este pasado familiar de la orfebrería, tan vinculado a la familia de Vicente Pozas Mirón, había sido casi totalmente desconocido para él hasta hace pocos años, cuando su padre, Vicente Pozas Barco, comenzó a narrarle las vivencias de su familia ceclavinera y cómo él mismo había llegado a aprender el oficio en su infancia. En efecto, una tía de Vicente, llamada Julia Pozas Barco, ha sido una de las mujeres orives de Ceclavín, que además supo rescatar del olvido esta hermosa profesión enseñándosela a su hijo Domingo Rosado Pozas, que en la actualidad es el único orive de Ceclavín.

Foto: Goyo Herrera
La charla de Vicente Pozas sirvió para recordar esta importantísima actividad, que forma parte del Patrimonio cultural inmaterial de Extremadura, y que hoy en día está lamentablemente en peligro de desaparición; a través de ella pudimos acercarnos sobre todo a las personas que durante generaciones cultivaron esta hermosa profesión y supieron legarnos piezas tan bellas como las elegidas por Vicente y que hoy forman nuestro conocido aderezo regional extremeño.

Foto: JVidal Lucía
Los numerosos asistentes a la actividad brindaron a Vicente un cariñoso aplauso mientras éste recogía de manos de nuestro Presidente la estatuilla con el emblema de la Asociación, que a partir de ahora le servirá como recuerdo imborrable de la estupenda mañana que nos hizo pasar.

Foto: Goyo Herrera
 
Vicente Pozas con el ex-voto de Adaegina. Foto: JVidal Lucía

Texto: Juan M. Valadés
Fotos: Goyo Herrera y José Vidal Lucía

16 de marzo de 2017

Así lo siento yo. Los verracos en la Edad del Hierro


Los verracos de la Edad del Hierro, por Pilar Barrios
(Sábado, 4 de marzo de 2017)

La segunda sesión de “Así lo siento yo” la ha protagonizado la profesora y musicóloga experimentada Pilar Barrios. Se trata de una actividad realizada por el Museo de Cáceres con el apoyo de la Asociación Adaegina
A lo largo de su intervención acreditó sus amplios conocimientos sobre los mitos populares, la música y los ritos relacionados con el tema propuesto: Los verracos de la Edad del Hierro, algunos de cuyos ejemplos se hallan en las salas y patio del recinto museístico.

Declaró que había elegido este aspecto cultural e histórico por el carácter sagrado que poseían los animales para el ser humano de la antigüedad. Indicó que el verraco era un símbolo del semental, del macho, que aparece también en los cantares muy posteriores de los quintos. Recordó el descubrimiento del verraco de Torrequemada y desarrolló la “ecuación histórica”: “animales antiguos > diosas romanas > cultos marianos”. Cómo muchos de los cultos religiosos actuales derivaron hacia advocaciones de la Virgen y fiestas de algunos santos: Las cerdas sacrificadas a Ceres, hoy sustituidas por piedras; en Montánchez, San Mateo reemplazó al verraco. En las Hurdes se bailaba ante los productos sacados de la matanza. Las Purificás y Las Candelas proceden de antiguos ritos judíos. 


Manifestó que el cerdo trasciende de animal rechazado a ser apreciado. En las imágenes que expuso destacan tres verracos de Madrigalejo y Botija. Vistas de los festejos de quintos y de las “corralás” de Torrequemada, los rituales de Paso, el ritual de los quintos transformado finalmente en danzas de niñas, en Albalá. De esta misma población, las danzas de cabreros, los domingos de piñata, los gallos. Una muestra de San Antón representado junto a un cerdo (el ahora famoso cerdo de San Antón).

Concluyó insistiendo en la visión del verraco como exponente del potencial masculino y en su carácter sagrado en la antigüedad y en los dos roles en realidad en cualquier persona: el masculino y el femenino. 


En definitiva, Pilar Barrios nos introdujo en una excelente amalgama de historia, arte, mitos, música y etnografía en su personal visión y en las sensaciones que le han producido esas piezas ancestrales, impresionantes en su inmovilidad, como en la actualidad se nos presentan los verracos adorados por nuestros antepasados lejanos.


 Texto: Vicente Rodríguez
Fotos: Goyo Herrera
Nuestro agradecimiento a la profesora Pilar Barrios por su magnífica aportación y a los amigos de Adaegina, Vicente y Goyo, por su acertada colaboración textual y gráfica.

14 de marzo de 2017

Marcha desde Brozas hasta el Puente de Alcántara


Marcha Puente Romano de Alcántara

Tras varias suspensiones por razones climatológicas al fin pudo realizarse esta marcha tan deseada como esquiva por el motivo expuesto.

Tuvimos que reducir la distancia debido a la imposibilidad de detener el autobús en el punto previsto en las inmediaciones de Brozas. La salida se efectuó en Villa del Rey, a unos diez kilómetros de Alcántara, recorriendo las llanuras cercanas, con el batolito granítico que aún resta y que sirvió a los romanos de recurso para la construcción del cercano puente monumental. Cruzamos varios arroyos sin dificultad y comprobamos cómo el verdor y las primeras floraciones empezaban a cubrir la campiña. La segunda mitad del recorrido nos adentró en una dehesa un tanto salvaje donde las carrascas rodeaban las encinas adultas y eran numerosas las huellas de jabalíes, de los que descubrimos algunas de sus zonas de baño. Hicimos un alto en el camino en las cercanías de Alcántara, en la ermita de la Virgen de los Hitos, a menos de un centenar de metros del término municipal de Mata de Alcántara, para detenernos después frente a los “bujíos” que aún se conservan a la entrada del pueblo. 


Tras atravesar la llamada plaza del Peral, en realidad plaza de Portugal, entramos por el Arco de la Concepción para admirar algunas casas palacios y reavivar el fuerte recuerdo de San Pedro en la Plaza de España, con la románica, solo en parte, Santa Maria de Almocóvar, la imponente estatua del Santo y el humilde y recio templo levantado sobre lo que fuera su humilde casa, sensaciones ascéticas y de serenidad nos invadieron en esos instantes, sobre todo al visitar la iglesia construida en tres fases y conservando aún muchos de los elementos románicos que aún conserva. 



El recorrido por los barrios antiguos nos llevó a apreciar la artística variedad de chimeneas y de portadas. Descubrimos piezas muy interesantes en este aspecto. Visitamos el conventual de San Benito, con su claustro de planta cuadrada y la iglesia de la Concepción que, aun sin finalizar, muestra sus pretensiones iniciales de catedral frustrada y sus características de joya del plateresco. Al lado de la puerta de la sacristía surge una hermosa escalera de caracol, bello ejemplar gótico. 


Tras la excelente comida en el restaurante Kantara-al-Saif (el puente de la espada) dedicamos la tarde al impresionante puente romano, llegando a visitarlo incluso en su base junto a la orilla del Tajo, un paseo reconfortante por la historia romana, también a través de las inscripciones que en abundancia lo adornan. 

Epígrafe dedicado a Trajano en el Arco honorífico del Puente de Alcántara
Inscripciones árabes medievales en el espacio entre la I y la D.

Una ruta en la que la Naturaleza, el Arte y la Historia nos envolvieron de nuevo para ampliar nuestra formación y satisfacer nuestro afán de conocimiento en nuestro tiempo libre.

Texto: Vicente Rodríguez Lázaro
Fotos: Teresa Díaz
Foto de la inscripción árabe: Goyo Herrera 
Nuestro agradecimiento a los tres por su excelente colaboración

11 de marzo de 2017

El Día Internacional de la Mujer de 2017 en el Museo de Cáceres

"Entre las actividades más queridas que desarrolla el Museo de Cáceres cada año, y ya suficientemente asentada tras la celebración de numerosas ediciones, se encuentra la conmemoración del Día Internacional de la Mujer. Nuestra iniciativa, bautizada desde sus inicios como "Historia(s) de Mujer(es)" tiene siempre como objetivo hacer visible el esencial papel que la mujer ha desempeñado y desempeña en la cultura actual y pasada, pese a la ocultación o menosprecio que ha venido sufriendo a lo largo de siglos de historia de una sociedad marcada por la desigualdad." (del programa de 2017)



Este año el Museo de Cáceres, con motivo del Día Internacional de la Mujer 2017 y siguiendo su ciclo "Historia(s) de Mujer(es)", ha programado tres interesantes actividades: En primer lugar, una visita guiada por la sección de Etnografía con el título "La mujer extremeña en la sociedad tradicional". Después, por la tarde, la inauguración de la Exposición de fotografías "Rompiendo moldes" y, para cerrar, un concierto de Chloé Bird acompañada por un trío de cuerdas. Una diversificada propuesta alrededor de la temática de la mujer, que resultó de gran atractivo y tuvo una amplia respuesta. Enhorabuena a Juan M. Valadés, director del Museo, y a Cristina Rojo, responsable de Educación del mismo, por la organización de estas actividades.

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Visita guiada a la Sección de Etnografía: "La mujer extremeña en la sociedad tradicional".



La visita, a las 12h, estuvo guiada por el director del Museo, Juan M. Valadés. Con gran rigor y   capacidad comunicativa, nos fue guiando por las distintas salas de la Sección de Etnografía. Nos invitó a observar los objetos expuestos en esta sección, para, a través de esa observación, poder llegar a los contenidos que encierran y así entender los procesos de producción y reproducción de la sociedad tradicional de nuestra región. Y el papel de la mujer en esta sociedad.

Fuimos así recorriendo las salas donde se muestran objetos dedicados a las tareas de producción de bienes (agrícolas, ganaderas, pesca fluvial, ...) o de su transformación (produccióon de queso, aceite, vino, ...), además de los diversos oficios relacionados o complementarios de estos procesos (manufactura textil, orfebrería,...). 


En todos ellos se analizó el papel correspondiente a las mujeres: ayuda en las tareas agrícolas, cuidado de los animales domésticos, dedicación a las tareas de la casa (en exclusiva para ellas), confección de aperos, venta de productos en los mercados o las tareas relacionadas con la manufactura textil.  Destacó el papel de sometimiento al varón que siempre tuvo la mujer, señalando como ejemplo que los tratos, aun en bienes aportados por ella, correspondían siempre al varón que actuaba en su nombre. También muy interesante la transmisión por línea matrilineal de muchos saberes de los distintos oficios; así, señaló su papel en el trabajo de orfebrería, cuyas técnicas en muchos casos eran transmitidas por las mujeres, hijas de los orfebres u orives.


En lo referente a la indumentaria de la mujer, además de los aspectos relacionados con la confección y con los aderezos que acompañan, describió algunos de los elementos componentes del traje tradicional, destacando la importancia de la decencia en el vestir y el valor social de la indumentaria. Curiosa la vitrina con elementos de ropa interior del varón y de la mujer.


Especial atención a los componentes de la dote, muchos de los cuales pueden observarse en diversas vitrinas: enseres del hogar, objetos de cobre, objetos de barro y cerámica, ropas de cama, joyas, indumentaria para los maridos, dinero en metálico, ... Aunque privativa de la mujer, la dote era siempre administrada por el varón.


Se hizo referencia a la fotografía de la familia Morán, de Malpartida de Plasencia, por los diversos objetos expuestos que pertenecieron a miembros de la misma. La imagen, además, es un excelente documento que ejemplifica muchos de los aspectos de la temática del papel de las mujeres en la sociedad tradicional, que era el objeto de la visita. En este caso una familia de labradores ricos de principios del s. XX.

La visita tuvo como último apartado asuntos relacionados con el mundo de las creencias populares y de la religión. Se destacó que la perpetuación de estos aspectos se ha realizado tradicionalmente a través de la mujer. Así se observaron diversos objetos, señalándose el carácter sincrético que se muestran en muchos de ellos. Rosarios, amuletos con la higa, media luna y  anagrama mariano, candiles, evangeliarios, relicarios... 


En el mismo sentido, se hizo referencia a los instrumentos de música tradicional con los que se amenizaban las fiestas y bailes populares. En ellos podían establecerse las relaciones y emparejamientos entre mozos y mozas, fundamentales para la asegurar la perviviencia de la comunidad.

Y un poco como conclusión de todo lo visto, la idea de que la historia personal de cada mujer en la sociedad tradicional acababa de alguna manera en el momento del casamiento. Juan señalaba que, en las narraciones que muchas mujeres hacían de su vida, terminaban su historia con la frase: "Conocí a mi marido y me casé".

Excelente visita a esta sección. Reflexión sobre los procesos y relaciones sociales, y sobre todo una documentada y rigurosa visión del papel que la mujer ha tenido en la sociedad. Enhorabuena y muchas gracias a Juan Valadés por su excepcional aportación.

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Exposición de Fotografía: "Rompiendo moldes".
A cargo de los alumnos y alumnas del Ciclo Superior de Imagen del IES El Brocense.
Profesores Coordinadores: Nuria Zotes y Santiago Márquez.


"La propia denominación de la exposición nos habla claramente del objetivo de las obras creadas por las personas participantes en esta interesante actividad artística, pues tratan de proponer un juego visual en que lo infrecuente se convierte en esperable y habitual con el objeto de romper los moldes tradicionales sobre las actividades que la sociedad ha tenido reservadas para cada uno de los sexos." (del programa de la exposición)
A la inauguración asistieron los protagonistas de la muestra, familiares y amigos, miembros de la Asociación Adaegina,  la Directora General del Instituto de la Mujer de Extremadura, Elisa Barrientos Blanca y la Directora de la Casa de la Mujer de Cáceres, Blanca Delgado de la Rosa.


Enhorabuena a los estudiantes y profesores de este Ciclo de Imagen del IES El Brocense por la excelente muestra fotográfica que nos han brindado. Puede visitarse en el Museo hasta el 16 de abril.

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Concierto: "Chloé Bird, acompañada por trío de cuerdas".

Excelente el concierto que disfrutamos ayer en el Museo de Cáceres con motivo del Día Internacional de la Mujer 2017. Chloé, al piano y a la guitarra, estuvo acompañada del fantástico trío de cuerdas formado por Elena Domínguez (violoncello), Jara Mª Roque (violín) y Mª Luisa Blanco (viola). Interpretaron un variadísimo repertorio compuesto por canciones de los discos "October Moon" "The darkest corners of my soul". También algunas primicias del nuevo disco que Chloé ha compuesto con poemas de Raúl Vacas y que lleva por título "Un mundo de niños raros". Se publica esta semana.

Una tarde mágica, plena de encanto y belleza musical, la que vivimos en la Sala de Roma del Museo de Cáceres: Prélude, Fade, Weird, Against Each Other, Niña de Espuma, The flood, Maybe Tomorrow, Furtive Lullaby, Niña Sombra, Con el Corazón, Niña Búho, Cabiria, ... fueron algunos de los títulos de las canciones con las que nos deleitaron.

Coco Blanco, Jara Roque, Elena DC y Chloé Bird
De izquierda a derecha, rodeadas por todos: Coco Blanco, Elena DC, Jara Roque y Chloé Bird

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Reconocimiento a Marisa Granado y Cristina Rojo. 

En un momento de este último acto del Día Internacional de la Mujer, la Asociación Adaegina de Amigos del Museo de Cáceres, ha querido hacer un reconocimiento al trabajo y colaboración con la misma de Marisa y Cristina. Se les hizo entrega de la cabrita, ex-voto de Adaegina, símbolo de la Asociación. 

Muchas gracias a las dos por su trabajo.

Texto y fotos: José Vidal Lucía